Daniel Cano: “La frutilla del postre es trabajar con mi hijo”
El entrenador formoseño, que dirigió a La Unión de Formosa en las temporadas 2019/20 (que finalizó por la pandemia) y 2020/21, atraviesa un gran momento en Paraguay, donde llegó a las finales de la liga con San José, equipo que comparte junto a su hijo Benjamín.
Daniel Cano, entrenador de San José, uno de los equipos finalistas en la Liga de Paraguay, contó a UCU Radio todo sobre su gran presente. Se refirió a compartir la experiencia con su hijo en el cuerpo técnico del equipo y al rival de las finales, Libertad, en una serie de tres partidos. También, habló sobre la Liga Nacional de Argentina y la superación de la covid-19.
“Siempre estuve entre Argentina y Paraguay trabajando. Estoy en un club donde hice mis primeras armas como entrenador del 92, 93 hasta el 97 y fue un honor que me hayan llamado de vuelta. Venía de una temporada difícil, sabiendo todo lo que acarreamos pero poniendo lo mejor de nosotros. Mejoré en muchas cosas y estoy contento de estar donde estoy y de jugar una final en la reactivación del básquet paraguayo, porque estuvieron prácticamente dos años sin competir. Ahora estamos en una final con un club que me sienta bien, donde ya trabajé en formativas, trabajé de coordinador general y ahora de entrenador con los mayores. La idea es poder defender el título logrado en el 2019 bajo el mando de un gran amigo como lo es Fabio Demti”, afirmó Daniel sobre su relación con el vecino país y con el San José, equipo con el cual desde anoche empezó a jugar las finales en busca del campeonato.
“Estoy muy contento y muy cómodo en el equipo. La frutilla del postre es trabajar con mi hijo, que está de asistente estadístico y con todo el trabajo de la asistencia general al entrenador. Es uno de los placeres que me está dando la profesión, después de 32 años en esto. Mi hijo es entrenador ENEBA nivel 2 y va a hacer el 3 próximamente. Decidió seguir mis pasos y le está yendo bien, ya consiguió club acá”, expresó acerca de la relación, ahora también laboral, que mantiene con su hijo Benjamín.
Cano se siente cómodo en Paraguay e inclusive apuesta a un proyecto de vida en el vecino país: “Tengo propuestas laborales en Paraguay. San José es un lugar en el que siempre estoy, pero si no es ahí, tengo posibilidades de quedarme por acá (Asunción). Es un lugar que me sienta bien y me queda a 150 kilómetros de mi casa en Formosa. Hay gente que quiere ir para adelante, la dirigencia está tratando de hacer el mejor papel posible. Yo enseño en un instituto que tiene una tecnicatura en básquet, hace cuatro años enseño ahí y ya se han formado muchos entrenadores. Está todo dado como para que me quede, ojalá se pueda dar”.
San José empezó ayer las finales contra Libertad y Cano se refirió a eso y la evolución del básquet paraguayo: “Las finales son otra historia y respetamos al rival, Libertad, y buscando esa serie. Ojalá que todos entiendan que esto es parte del crecimiento y que el básquet paraguayo necesita cambiar algunas cosas. Los clubes están trabajando mucho”.
“Soy un agradecido de la gente que me tuvo en cuenta y me dio una mano en La Liga. Mario Romay es mi amigo personal, el me dio la oportunidad de entrar al básquet profesional, como es la Liga Nacional y el TNA (Torneo Nacional de Ascenso ahora llamado Liga Argentina), y me dio la oportunidad de dirigir al equipo de mi provincia, algo que voy a llevar como bandera toda mi vida. Fue duro estar seis meses encerrado en un hotel y pasar un virus muy difícil, la covid-19 me trató muy mal. Hubo noches en las que creí que venía lo peor y lo superé con mucha fe”, reflexionó el formoseño.
“El básquet está en una etapa de crecimiento en Paraguay, se está tratando de mejorar cada vez más. Hay proyectos de jugadores jóvenes y de mucha altura. Hay todo para unir fuerzas en un país que quiere ir para adelante. Con poco se puede lograr mucho”, se esperanzó.
Fuente: Uno Contra Uno.