Tensión en la reunión de gabinete
De Milei a los gobernadores: “Los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos”
Tras la reunión de Gabinete, el presidente disparó contra los mandatarios provinciales, sin distinción partidaria. Su enojo tiene que ver con los condicionamientos que le ponen a ley ómnibus, especialmente en un tema sensible para las provincias como las retenciones.
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Cuentan quienes estuvieron presentes en la reunión de Gabinete de ayer que a Javier Milei se lo vio especialmente enojado con los gobernadores, “sin distinción partidaria”, en una aclaración que contempla que no solo apuntó contra los que accedieron a sus cargos por Unión por la Patria y el kirchnerismo, sino también a los de Juntos por el Cambio.
El presidente siguió de cerca las negociaciones que el oficialismo mantuvo con los legisladores durante este miércoles, tras la firma del dictamen por la ley ómnibus, y la disputa mediática contra los mandatarios provinciales que lideró el ministro de Economía, Luis Caputo, a quien respaldó: “Los voy a dejar sin un peso, los voy a fundir a todos”, lanzó, sin rodeos ante la atenta mirada de sus ministros, luego de que trascendiera que el conteo de votos en la Cámara de Diputados muestra un escenario complejo para el oficialismo.
En rigor, más que un respaldo, fue la continuidad de una estrategia que vienen desplegando Milei y Caputo en las últimas semanas para persuadir a que los gobernadores, que necesitan fondos frescos para cubrir el rojo fiscal de sus provincias, a convencer a los diputados y senadores a votar el proyecto Bases para la libertad de los argentinos que promueve el Gobierno.
El plan tuvo como primer capítulo el aviso por parte del Gobierno respecto a que no se avanzaría con la reversión de los cambios en Ganancias dispuesto por Sergio Massa en su etapa como ministro de Economía, en el marco del plan platita impulsado durante la campaña electoral; y se acentuó en los últimos días con la advertencia del jefe de Estado.
Y este miércoles Caputo insistió con un desafío público a los gobernadores: contó que reunió a su tropa “para delinear todas las partidas provinciales que se recortarán inmediatamente si alguno de los artículos económicos es rechazado”. “No es una amenaza, es la confirmación que vamos a cumplir el mandato que nos han dado la mayoría de los argentinos de equilibrar las cuentas fiscales para terminar con décadas de inflación y flagelo económico”, aclaró.
Dirigentes de la oposición, como el diputado Miguel Pichetto, presidente del bloque Hacemos Coalición Federal, le contestaron con dureza: “Tiene que dejar de apretar a los gobernadores y tratar de buscar acuerdos con los gobiernos provinciales en lugar de amenazarlos”, le respondió. Y recordó que “no tuvo la valentía” de presentarse en el Congreso a defender el proyecto.
En Gabinete, Caputo se sumó a la línea trazada por Milei y explicó a sus pares: “Si esta ley no llega a buen puerto se va a seguir ajustando el gasto público de todas las maneras alternativas que haya, incluyendo las partidas que se asignan a las provincias”. Con esto se refiere a todos los desembolsos por fuera de la masa coparticipable: los aportes del tesoro nacional (ATN), las obras, los programas para distintas áreas acordados con cada gobernador y otras partidas discrecionales, que en 2023 oscilaron en total en torno a los 2 billones de pesos.