LA TEMÁTICA FORMA PARTE DE LA CURRÍCULA ESCOLAR
Dengue y chikungunya: Capacitan a docentes en la prevención desde las aulas
La educación debe fomentar en la comunidad la participación en el cuidado del ambiente, especialmente en lo que respecta a la identificación y eliminación de los depósitos de agua que son propicios para la reproducción del mosquito Aedes Aegypti (criaderos).
A cargo de un equipo del Ministerio de Desarrollo Humano, en el Instituto Pedagógico Provincial Justicia Social (IPPJS), se realizó una capacitación dirigida a los directivos y docentes de las escuelas primarias y secundarias de la capital, sobre la prevención del dengue y la fiebre chikungunya.
En el marco del contexto epidemiológico que presenta la provincia y la región respecto de esas enfermedades transmitidas por el mismo mosquito, con la participación de más de 180 asistentes, entre funcionarios de Educación, directivos y docentes, la jornada también fue transmitida de forma virtual a todas las delegaciones zonales educativas del interior provincial.
El objetivo fue repasar y actualizar los contenidos de prevención en torno a las enfermedades con los directivos de las distintas instituciones educativas, teniendo en cuenta que la temática forma parte de la currícula escolar.
Desde Educación pusieron de relieve la importancia que tiene este tipo de capacitaciones para seguir promoviendo conciencia en la comunidad educativa, sobre la necesidad de abordar esos temas en las actividades escolares diarias, a fin de promover el control del mosquito transmisor y contribuir de ese modo, a reducir las posibilidades de que se desarrollen epidemias por cualquiera de esas enfermedades.
Mediante las exposiciones del equipo de salud, los directivos y/o responsables de los distintos establecimientos educativos, recibieron nuevas estrategias y herramientas pedagógicas que los docentes pueden implementar desde las aulas, que están orientadas a fortalecer el proceso enseñanza – aprendizaje para que posteriormente puedan ser aplicadas de forma práctica en el ámbito escolar, familiar y comunitario.
Remarcaron que la educación debe fomentar en la comunidad la participación en el cuidado del ambiente, especialmente en lo que respecta a la identificación y eliminación de los depósitos de agua que son propicios para la reproducción del mosquito Aedes Aegypti (criaderos).
Por último, destacaron la importancia de promover desde el espacio educativo, es decir desde las aulas, la cooperación comunitaria, hábitos diarios y el cumplimiento de cuidados que sean efectivos para controlar y reducir la proliferación de esa especie de mosquito, transmisor común de ambas enfermedades.