Empleo y producción en la agenda de Argentina e Israel

En el Día del Trabajador evocaba el tiempo en que en esta fecha el gobernador se hacía presente en el recinto de la Legislatura para dar lectura a su mensaje ante los representantes del pueblo y a la comunidad formoseña toda.
El 1 de mayo de 2000 hubo ocasión de viajar a España, más precisamente a la Comunidad Autónoma de Galicia, en compañía de Oswaldo Urbieta, para cubrir las actividades del gobernador Gildo Insfrán en su encuentro con el presidente de la Xunta gallega.
Es que don Manuel Fraga Iribarne, un año antes, había aceptado la invitación del gobernador y por entonces presidente de la CRECENEA Litoral para que Galicia se sumase al bloque regional que se había integrado a través de la CODESUL con los estados del sur del Brasil en una reunión celebrada en Florianópolis.
Y en ese encuentro el responsable de la revolución turística española cuando fue ministro de Turismo no solo empatizó con Insfrán sino que lo invitó a viajar a Galicia para sumarse a la Semana Verde de Silleda, la mayor feria internacional gallega y para que concretase un acuerdo para que los empresarios y productores tuviesen un lugar en la Zona Franca de Vigo que los vinculase a los países de la Conferencia de Regiones Periféricas y Marítimas para el intercambio comercial.
Insfrán llegó a Galicia el 2 de mayo, 24 horas después de haber dado a conocer su mensaje ante los diputados.

El viaje a Israel

También en mayo, pero en 1996, luego de asistir a una reunión de gobernadores en el Consejo Federal de Inversiones, el mandatario formoseño viajó a Israel para asistir a la mayor feria de tecnología del mundo, AGRITECH, y para imponerse acerca de las modernas tecnologías que ese estado producía para resolver sus limitaciones extremas en cuanto a la disponibilidad de agua para el consumo y la producción.
Formosa pretendía, entonces, replicar ese modelo en el centro oeste y oeste formoseños para frenar el proceso de desertificación de sus tierras y generar modelos productivos y de creación de empleo que evitase el éxodo poblacional que se estaba registrando.
En síntesis, con el apoyo de científicos y profesionales de Israel surgieron los Centros de Validación de Tecnologías Agropecuarias. En 1997 se habilitó el primero de ellos en Laguna Yema y luego surgieron los de Las Lomitas, Misión Tacaaglé, Ibarreta y Ceibo Trece.
En todos los casos el objetivo se fundamentaba en el propósito de avanzar a los mandamientos del Modelo Formoseño sobre la recreación de una alianza estratégica entre la educación, la producción y el trabajo para garantizar una mejor calidad de vida a los habitantes.

Volver a Medio Oriente

Con la misma finalidad se volvió a viajar a Israel en este 2022, por una iniciativa conjunta entre el Gobierno nacional y la Embajada de ese país en la Argentina. Participaron de la Misión Tecnológica y Científica sobre el Manejo del Agua representantes de 10 provincias, entre ellos 8 gobernadores y tres ministros del PEN.
La comitiva visitó las principales empresas de gestión de agua para la producción y consumo humano, como así también los principales centros científico tecnológicos del país. Asimismo, se repasaron los avances en materia de intercambio tecnológico para la multiplicación de riego en Argentina.
En la audiencia con el presidente de Israel, Isaac Herzog, el ministro del Interior argentino, Wado De Pedro, aludió al potencial productivo del país que cuenta con 2.000.000 hectáreas en producción bajo sistemas de riego con una proyección que puede extender esa superficie a 6 millones.
El presidente israelí opinó que con los recursos que tiene Israel y los recursos de la Argentina, se está en condiciones de producir alimentos para responder a la demanda mundial, coincidiéndose en que para alcanzar ese objetivo los dos países, que tienen economías complementarias, deben unirse para potenciar la producción y el empleo.
Herzog mostró interés por las particularidades productivas y geográficas de cada provincia que fueron relatadas por cada gobernador y manifestó su interés por visitar Argentina en el futuro.
Quienes estuvieron en Israel se sorprendieron con la magnitud alcanzada por las innovaciones registradas en el campo de la ciencia y la tecnología, así como también con la posibilidad de aplicarlas aquí para fomentar el desarrollo productivo y la generación de fuentes de trabajo.
Justo L. Urbieta