LIGA ARGENTINA DE BÁSQUETBOL
Firme en Entre Ríos
Unión y Quilmes lograron importantes victorias para seguir peleando en los puestos de finales. Se impusieron ante Villa Mitre y Del Progreso respectivamente.
Unión de Colón abrochó un partido importante de local frente al elenco bahiense, ganándole por 84 a 68. Giménez estuvo imparable con 23 puntos, seguido por Bilat con 20 puntos y Acuña con 18, fueron los más destacados en el local.
El primer cuarto fue parejo, ambos aportaron mucho en el tanteador en los primeros minutos de juego. Sin embargo Villa Mitre pisó más fuerte y el local cometió errores que la visita aprovechó para irse arriba 14-17.
En el segundo cuarto La Unión supo revertir sus errores y empezar a sumar de a poco para alejarse en el marcador. El juego comenzó a llevarlo para su lado y Villa Mitre solo cosechaba dudas frente a un rival que se mostraba muy eficiente tanto ofensiva como defensivamente, yéndose al descanso arriba por 37 a 29.
A la vuelta del entretiempo, La Unión tuvo varios deslices potenciando que la visita se acerque en el tanteador. Sin embargo la diferencia que había cosechado le sirvió a los de Guastavino para mantenerse y cerrar el tercer periodo arriba por 57 a 54. El último cuarto fue la diferencia. La Unión frenó la embestida rival y atravesó su mejor momento del partido, ya que logró quebrar el juego y alejarse en el tanteador, festejando por 84 a 68.
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Síntesis
La Unión 84: Conti 8, Frencia 5, Lavoratornuovo 2, Romero 6, Gimenez 23 (FI), Bilat 20, Acuña 18, Cabrera 2, Diaz, Longoni. DT: M. Guastavino.
Villa Mitre 68: Martínez 9, Bollo 16, Cuervo 5, Harina 7, Duvanced 11 (FI) , Andrés 6, Alem 5, Depaoli 4, Griszczuk 3, Iglesia 2. DT: L. De Tomasi.
Parciales: 14-17, (23-12) 37-29, (20-25) 57-54, (27-14) 84-68.
Arbitraje: Delsart, Macias y Larrosa.
Estadio: Carlos J. Delasoie
Desbordó de cerveza
Fue un duelo clave pensando en el futuro y Quilmes lo aprovechó al máximo. El cervecero, con solidez y mucha inteligencia, anuló a Del Progreso en su casa, ganó con claridad y contundencia (87-64) y se fue feliz de General Roca. Para los de Mar del Plata fue un gran triunfo de cara a los playoffs y para el auriazul un duro golpe ante su gente.
Luego de un primer tiempo pobre de ambos equipos, a la hora de la efectividad, la visita comenzó a encaminar la noche a su favor con goleo repartido, defensa y sacando provecho de un Progre que nunca se sintió cómodo, por errores propios, pero en especial por muchas virtudes del cervecero.
En el ganador (ahora con récord de 12 triunfos y 15 caídas), Ezequiel Dupuy (21 puntos) y Gregorio Eseverri (20 con 6 triples más 5 rebotes) encabezaron la ofensiva, pero bien acompañados por Tomás Nally (10 y 8 recobres), Matías Aristu (14 unidades y 12 rebotes) y Junior Cequeira (10 y 7 asistencias).
En el dueño de casa, el más destacado fue el interno Facundo Sanz (12 puntos y 13 recobres), mientras que Julián Ruiz aportó 11 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias. Una buena para Del Progreso fue el regreso, luego de una lesión, de su capitán Gustavo Maranguello (7 puntos y 6 rebotes).
Progre arrancó incómodo y errático desde el vamos. En apenas 4 minutos sumó 0-7 en triples (0-11 en el parcial y 4-29 en la noche) y le costó darle juego a Sanz y que Ruiz pudiera, como lo intenta siempre, tener el control del juego. Todo mérito de Quilmes. Cequeira hizo valer su experiencia, Eseverri lastimó con sus triples y el resto cumplió con su rol. Los de Mar del Plata ganaron el primer parcial 14-8.
En el segundo, el equipo dirigido por Juan Marcos Kass siguió trabado en ataque, sin claridad y el cervecero comenzó a escaparse. Dupuy (ex Progre) ganó protagonismo (8 en el cuarto) y la diferencia llegó a 15 puntos (26-11) a los cinco minutos. El banco local no paró de moverse y los buenos ingresos de Santana y Eder (dos triples), le dieron esperanzas al local (se puso 28-21), pero Quilmes bancó ese momento y se fue al descanso largo en ganancia 34-26.
En el tercer cuarto, el gigante de la calle Maipú esperó por la reacción auriazul, pero esta no llegó. Del Progreso siguió complicado en ataque y también a la hora de pelear por el rebote. Y Quilmes no dejó pasar las chances. Eseverri reapareció con sus triples, Nally, Aristu y Barrionuevo ganaron y mucho en los tableros y la brecha volvió a ser importante. Dos veces, la visita sacó 17 de ventaja (45-28 y 58-41). El local no dejó de luchar, pero ya pasó a depender de lo individual y la pelota no quiso entrar. El cuarto se cerró 60-48.
En el segmento final, Quilmes no se equivocó, Eseverri y Dupuy metieron triples casi decisivos y la defensa sobre Ruiz (apenas 2 puntos en los primeros tres parciales) fue vital. El base no pudo darle el habitual juego al resto del equipo y tampoco pudo ganar en el uno contra uno.
A 4 minutos del cierre, con solidez, los marplatenses sacaron 22 de luz (82-60) y se aseguraron un gran triunfo, pese a los intentos finales de Ruiz (9 en el cuarto). El cervecero, siendo más regular y anulando las principales virtudes de un Progre que sufrió en ataque, festejó una muy buena victoria, clave pensando en tener la mejor posición posible para las finales.