SOCIEDAD
Más de 200.000 fieles participaron del funeral del papa Francisco
Este sábado, se celebró el funeral del papa Francisco en la Plaza de San Pedro.
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En el evento, hubo un rectángulo de máxima seguridad donde se ubicaron los invitados especiales que encabezaron la delegación.
La delegación fue presidida por la Argentina porque es el país de nacimiento del papa, explicó el periodista y especialista en temas de realeza Rodolfo Vera Calderón. En este caso, el presidente Javier Milei se sentó en primera fila junto a su par italiano, Sergio Mattarella, y la primera ministra, Giorgia Meloni, las autoridades del país donde se encuentra el Estado del Vaticano.
Las primeras filas fueron dedicadas a las Casas reales católicas que anunciaron su presencia: Felipe VI y Letizia de España. Felipe y Matilde de Bélgica, el Gran Duque Enrique y la Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo, los príncipes Alberto y Charlène de Mónaco, y del copríncipe de Andorra, Joan Enric Vives, actual obispo de la Seu de Urgell. Junto a ellos se sentará el Gran Maestre de la Orden de Malta, frey John T. Dunlap. La gran ausente fue Máxima de Holanda, que además de soberana católica es argentina.
Durante la misa, el cardenal Battista Re recordó la misión de Francisco como guía de una iglesia que él consideraba como un “hospital de campaña”, siempre al lado de la batalla. A la “cultura del descarte”, él imponía la cultura de la fraternidad y la misericordia, ya que aseguraba que “ninguno se salva solo”.
El féretro abandonó la plaza de San Pedro y se trasladó en el papamóvil, acompañado por un pequeño cortejo fúnebre, hacia la Basílica de Santa María La Mayor, donde fue inhumado.
El ataúd del papa viajó en un vehículo abierto, para que los fieles que se congregaron en el recorrido, en las calles de Roma, pudieran ver el féretro y despedirse del pontífice. Tras 30 minutos de trayecto, la sepultura llegó al nicho de la nave lateral de la basílica liberiana, entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, donde se colocó después del canto de cuatro salmos y cinco intercesiones.