Residencias socioeducativas con actividades que favorecen al desarrollo de niños y niñas
Se desarrollan talleres de lectura, manualidades y ornamentación, carpintería e informática, como así también otros destinados a medidas de autoprotección como el uso de las redes sociales, con los más grandes, y el cuidado del cuerpo, con los más pequeños.
Durante las vacaciones las residencias socioeducativas que dependen del estado continúan desarrollando actividades tendientes a divertir, entretener y al mismo tiempo enseñar a niñas, niños y adolescentes sin cuidados parentales.
El director de Niñez y Adolescencia, Iván Medina Patiño, explicó que “se están realizando diferentes actividades, no solo para que puedan disfrutar de estas vacaciones, sino también como una manera de garantizar y restituir sus derechos y al mismo tiempo favorecer el desarrollo personal de estos niños y niñas”.
Señaló que para ello desarrollan talleres de lectura, manualidades y ornamentación, carpintería e informática, como así también otros destinados a medidas de autoprotección como el uso de las redes sociales, con los más grandes, y el cuidado del cuerpo, con los más pequeños.
Y explicó que “estos talleres buscan brindar herramientas para potenciar sus capacidades y se desarrollan de acuerdo a las distintas edades y residencias en que se alojan estos niños, niñas y adolescentes, ya que se debe contemplar que albergan a niños y niñas de apenas días de vida, hasta adolescentes de 17 años”.
Este acompañamiento integral a los chicos se da por parte de los operadores, el equipo técnico, y personal que, voluntariamente, presta servicios dentro de las residencias, como así también, en ocasiones se trabaja de manera conjunta con otros organismos, con quienes se desarrollan actividades recreativas, lúdicas y deportivas al aire libre, como el Ministerio de Turismo y la Secretaría de Deportes y Recreación Comunitaria.
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Familias solidarias
Medina recordó que “el programa familias solidarias, es otra opción que tienen estos niños, niñas y adolescentes para vincularse con familias que están dispuestas a brindar un ambiente de contención y amor, acogiéndolos temporariamente en sus casas y que funciona durante todo el año, más allá del período de vacaciones”.
Al respecto agregó que “esta experiencia genera un cambio notable en los chicos, para bien por supuesto, les hace bien y lo transmiten a los demás niños y niñas”.