Se realizó un plenario de experiencias sobre la plantación y manejo del tangola
El pasto tangola es una de las especies forrajeras que los productores tienen disponible para mejorar la alimentación del ganado y consecuentemente incrementar la productividad del sistema es incorporar una pastura a un esquema pecuario. La utilidad de una pastura depende de la habilidad de transformarse en carne y de su persistencia en el tiempo.
El Ministerio de la Producción y Ambiente de Formosa realizó un Plenario de experiencias en plantación y manejo del tangola, que convocó a referentes técnicos del Ministerio y de escuelas agrotécnicas así como del sector privado que se encuentran trabajando en la región Este provincial.
Una de las herramientas válidas que los productores tienen disponible para mejorar la alimentación del ganado y consecuentemente incrementar la productividad del sistema es incorporar una pastura a un esquema pecuario. La utilidad de una pastura depende de la habilidad de transformarse en carne y de su persistencia en el tiempo.
El pasto tangola es una de las especies forrajeras que cumple todos esos atributos. “Esta especie, introducida en Formosa hace ya varios años, crece en distintos tipos de ambientes, destacándose por un estrepitoso desarrollo en suelos anegables, donde su agresividad, velocidad de crecimiento y tolerancia al pastoreo, anulan toda posible competencia por parte de otras pasturas y la posicionan como la única alternativa posible para potenciar estas áreas”, señalaron los técnicos durante el encuentro organizado en el campo experimental Sargento Rivarola.
Durante las jornadas, que fueron virtuales y prácticas, explicaron distintas experiencias en cuanto a la preparación de suelo, de guías, plantación y manejo inicial del recurso. Además, pusieron énfasis en la ventaja que esta especie brinda principalmente a ganaderos paipperos de sembrar estolones ya enraizados en forma previa, lo que anticipa el proceso de producción de biomasa forrajera.
“Este pasto puede sembrarse bajo distintos métodos, que se adecuan según los recursos, herramientas y maquinaria que tengan a mano los productores. Por su multiplicación de tipo agámica, la implantación se realiza a través de guías o estolones. La siembra puede ser en forma manual, con discos o utilizando las maquinas tangoleras y preparando las guías o estolones de forma tal que se favorezca el contacto con el suelo”, expresaron.
“Para asegurar la provisión de guías para una siembra exitosa, actualmente se disponen de semilleros en distintos puntos de la geografía provincial, cubriendo desde pequeñas superficies en las chacras de nuestros paipperos, en escuelas agrotécnicas, predios comunitarios de productores o campos experimentales, hasta áreas de considerable extensión en sistemas ganaderos más desarrollados”, resaltaron.
Para finalizar, el ingeniero Alejandro García, subsecretario de Producción Sustentable, destacó que “el gran avance en la implantación y aprovechamiento de esta pastura, notoria en estos últimos años, es la resultante de la visión, la planificación y el trabajo compartido entre productores y sus asociaciones, con los referentes técnicos, las instituciones y organismos provinciales y nacionales, como los municipios, el INTA, el CEDEVA y el Ministerio de la Producción y Ambiente”.