Tras la baja en la recaudación se aceleró el ajuste del gasto público

El Gobierno acentuó el recorte de los gastos durante marzo y la baja fue de 42% real, la más pronunciada en lo que va del año. Advierten que la dinámica es de círculo vicioso: cae la recaudación, entonces se ajusta más el gasto, por ende hay más recesión y en consecuencia vuelve a perder la recaudación.

El ajuste del gasto público devengado de marzo fue el mayor en lo que va del año: la baja fue de un extraordinario 42% en términos reales. Se aceleró la dinámica de los recortes. Marzo fue, además, el mes de mayor contracción en los ingresos tributarios, con una baja de 16% real, de la mano de la recesión económica, que impactó de lleno en la recaudación de IVA, y también a causa de la quita de Ganancias decidida durante el año pasado. El Gobierno pretendía recuperar 0,4% del PBI con la restitución del impuesto pero la suba del mínimo no imponible y la escala más progresiva podrán reducir esa ambición a un 0,2%. A menos ingreso, el Gobierno debió ajustar más el gasto. La dinámica va mostrando cierta retroalimentación, ya que el superávit fiscal aumenta la recesión y el freno en la actividad impacta en los ingresos del fisco.
En ese sentido, el economista jefe de Vectorial, Haroldo Montagu, explicó: “Baja el gasto, baja la actividad y por ende cae la recaudación. Los datos de marzo no son definitivos y son devengados, hay que ver el base caja como da, pero asumimos que va a dar parecido. Hay dos cosas: o estamos efectivamente ante un nuevo y más brutal ajuste frente a una menor recaudación, o esto puede aguantar con la recaudación que viene del comercio exterior. El impuesto País ya paso a ser el 10% de la recaudación tributaria total, ante la pérdida de peso de Ganancias”.
La Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (Asap) publicó los números de la ejecución presupuestaria de marzo. A través de un informe, mostró así que el gasto público devengado sufrió una contracción de 42,9%. Coincidió la consultora Analytica, que observó una contracción del 41,3%.
Los números publicados por Asap y Analytica reseñan lo ocurrido con el gasto devengado, es decir con los asientos contables. La Secretaría de Hacienda publicará el resultado fiscal el 22 de abril, salvo que el ministro de Economía, Luis Caputo, vuelva a adelantar los datos oficiales. Esos números mostrarán la dinámica del base caja. Es decir, lo efectivamente pagado, dejando afuera aquellos gastos que hayan pasado a generar una deuda flotante que habrá que cancelar en meses próximos. Es decir, ambos números y sus dinámicas no necesariamente sean idénticos pero sí el devengado es un buen indicador adelantado de lo que podrá publicar Hacienda.
La baja de la recaudación tributaria publicada por Afip el miércoles pasado fue del 16% real, y tomando una inflación de 13% para marzo. Se trató de la contracción interanual más fuerte en lo que va del año. Para Asap la caída en el total de los ingresos públicos, que incluye no impositivos y rentas de la propiedad, fue de 15,3% real interanual. La aceleración en la caída se observa al comparar con el promedio del primer trimestre, que mostró una baja de solo 3,6% real.
Más allá del impacto positivo de los impuestos del comercio exterior (Montagu destacó que si hay una nueva devaluación esa incidencia será creciente), el Gobierno busca compensar parte de lo perdido con la recomposición de Ganancias. El economista de Eco Go Lucio Garay Méndez explicó que habrá que esperar la definición, una vez aprobada la ley, del piso y la gradualidad de las escalas, aunque estimó, en base a la intención oficial de que más gente pague, pero con los de menos ingresos haciéndolo en menor cuantía, en el neto el Gobierno podrá recuperar un 0,2% del PBI, la mitad de lo que preveía originalmente.