Variante Delta: fase de vigilancia en Formosa con los hisopados en los controles de ingresos

El médico infectólogo explicó que en los controles se exige el estudio previo en el ingreso y también al quinto y décimo día. Además, se enviaron muestras al Malbrán de distintos puntos de la provincia, ya que se seleccionan aquellos que potencialmente sean más probables y se los manda para el control.
El doctor Julián Bibolini explicó cómo se trabaja en Formosa para la prevención de la variante Delta del coronavirus y dijo que “estamos en la fase de vigilancia, que incluye el control a los ingresos con los hisopados”, recordando que se exige el estudio previo a la entrada a la provincia en el ingreso y también al quinto y décimo día.
“Además –indicó– enviamos muestras al Malbrán de distintos puntos de la provincia, ya que se seleccionan aquellos que potencialmente sean más probables y los mandamos para el control”.
Bibolini recordó que a toda persona que al ingresar dé positivo tiene que ir a aislamiento, al igual que quienes entran al país desde el extranjero deben cumplir una cuarentena de 7 días: “Se aíslan por más que tengan el PCR negativo y se van de alta con el último estudio negativo”.
Además, dijo que la variante Delta se transmite muchísimo más fácil que las anteriores, “por lo tanto más personas se van a contagiar y habrá más posibilidades de sobresaturar los sistemas, por eso hacemos tanto hincapié en el control y la vigilancia de los ingresantes”.
Asimismo, insistió en señalar que “tenemos que aprender a convivir con el uso permanente del barbijo y el distanciamiento físico; ya tendría que ser una costumbre, algo cultural, así como lo veíamos en Japón mucho antes de esto, hay que usar el barbijo, principalmente en los lugares donde hay mucha gente y más aún en sitios cerrados”.
Recibí las noticias en tu email
95 pacientes en la UTI
Bibolini informó también que actualmente hay 95 personas en terapia intensiva, haciendo uso principalmente de dos hospitales: “Todo se está concentrando en el Hospital Evita y el Hospital de Alta Complejidad (HAC), mientras que el Hospital Central se va dejando para pacientes no covid-19 porque hay que ir administrando y habilitando los servicios, retomando las actividades pre-pico de la pandemia”.
“Estas 95 personas -agregó- son los pacientes que presentan peor pronóstico, ya que tienen entre el 50-80% de posibilidades de fallecer. Todo el esfuerzo, incluida la vacuna, es para evitar eso justamente”.